Vecinos de Venado Tuerto limpiaron un minibasural y otros volvieron a arrojar desechos

El programa local, Reciclar Venado, se realizó un nuevo “plogging”, la práctica que combina caminatas y ejercicios físicos al aire libre con la recolección de basura y la limpieza de espacios públicos. Diferentes organizaciones y personas se hicieron presentes en el barrio Alejandro Gutiérrez y limpiaron un minibasural ubicado en calles Matheu y Neuquén, lindante con el canal Cayetano Silva. Sin embargo otros vecinos se acercaron al lugar en moto y volvieron a arrojar residuos.

De la actividad realizada el sábado pasado participaron voluntarios de Reciclar Venado, trabajadores municipales, alumnos y profesores del ICES, personal de la firma Corteva y vecinos y vecinas de la zona. También estuvo presente el intendente Leonel Chiarella junto al secretario de Desarrollo Productivo, Santiago Meardi; la subsecretaria de Participación Ciudadana y responsable del Reciclar Venado, Sofía Galnares; y el presidente del Concejo, Juan Ignacio Pellegrini. Este plogging se enmarcó en la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente (5/6).

No obstante y tras realizarse la erradicación de minibasurales del barrio Alejandro Gutiérrez, se generó una situación que fue repudiada por la comunidad. “Lamentablemente algunos vecinos se acercaron en moto y comenzaron a arrojar residuos en el lugar que se había limpiado con mucho esfuerzo, generando mayor disconformidad cuando se les solicitó que retiren los residuos y se negaron a corregir su accionar”, explicó Sofía Galnares.

“Si bien las personas identificadas serán sancionadas por el Tribunal de Faltas, lo lamentable es que muchos irresponsables no valoran el compromiso de los demás vecinos que se solidarizan para lograr una ciudad con ambientes más limpios”, contó la funcionara municipal.

Participaron voluntarios, trabajadores municipales, alumnos y profesores del ICES, personal de la firma Corteva y vecinos de la zona

Participaron voluntarios, trabajadores municipales, alumnos y profesores del ICES, personal de la firma Corteva y vecinos de la zona