El expresidente y actual candidato republicano, Donald Trump, aseguró que quiere ser “el protector” de las mujeres durante un mitin en Pensilvania, de cara a las elecciones presidenciales de noviembre.
En su discurso en la Universidad de Indiana, en el “estado indeciso” de Pensilvania, Trump sugirió que sus políticas en torno a la migración y a la economía pondrían a las mujeres “a salvo”, después de asegurar que ellas eran “más pobres”, estaban “menos sanas” y que estaban “menos seguras en las calles” que hace cuatro años.
“Siempre pensé que le gustaba a las mujeres, nunca pensé que tuviera un problema con ellas”, dijo el candidato, que actualmente se encuentra por debajo de su rival, la vicepresidenta Kamala Harris en las encuestas de este grupo demográfico.
Según la encuesta de NBC News sobre las votaciones, mientras el ex presidente lidera en votos masculinos con un 52% contra 40%, la diferencia en el grupo de las mujeres es bastante más amplia, con más de 58% apoyando a la candidata demócrata, contra un 37% a favor de Trump.
“Abandonadas, solitarias y asustadas”
“Ya no estarán abandonadas, solitarias o asustadas”, dijo el exmandatario durante el mitin, asegurando que, de elegirlo, “ya no sufrirán la ansiedad de todos los problemas actuales del país”.
Según publicó en su propia red social, Truth Social, el candidato republicano considera que “las mujeres son más pobres, menos sanas, menos seguras en las calles , más deprimidas e infelices, menos optimistas y seguras en el futuro que hace cuatro años”.
En su discurso, Trump señaló que las mujeres serían “más felices, saludables, seguras y libres” si él llegara a la presidencia nuevamente.
Jonathan Chait, analista de New York Magazine, opinó que “lo que lo hace más horripilante es que implícitamente reconoce que las mujeres se rehúsan a apoyarlo, pero presume que es porque están fuera de sí”, en referencia a los dichos del presidente en Indiana.
El periodista argumentó que esta promesa de bienestar para la mujer de Trump se predica sobre su creencia de que la mujer sería más feliz pensando y sintiendo menos. “Es el tipo de argumento que un abusador haría con una víctima que le gustaría seguir dominando”, concluyó el analista.
Esta línea de pensamiento corre en paralelo de la expuesta por el senador James David Vance, quien es compañero de fórmula de Trump, cuando, durante una entrevista con Tucker Carlson, condenó de solitarias e infelices a lo que llamó “señoras-gato sin hijos” (childless cat ladies), refiriéndose de forma despectiva a las mujeres del partido demócrata debido a lo que él consideraba “abandono y soledad” por no tener hijos.
“Cuando sos una estrella, te dejan hacerlo”
“Como presidente, tengo que ser su protector”, espetó el candidato que en 2023 fue declarado culpable de acoso sexual y difamación a la escritora E. Jean Carroll.
Carroll, que hoy tiene 80 años, denunció en un artículo de la revista New York, publicado en junio de 2019, al entonces presidente , por una agresión sexual que habria transcurrido años antes.
En una declaración oficial durante su mandato, Trump negó conocer a Carroll, la acusó de “intentar vender libros” y dio a entender que tenía una agenda política por detrás de su acusación.
Al ser preguntado por el caso durante una entrevista, el entonces presidente dijo que Caroll estaba “mintiendo totalmente” y que el hecho era imposible ya que “ella no es mi tipo”.
No es el único caso de conducta inapropiada frente a mujeres del ex presidente. En una infame grabación de 2005, hecha pública en 2016 por el Washington Post, conocida como el ‘Hollywood Access Bus’, se puede escuchar a Donald Trump expresar su punto de vista frente a sus vínculos con mujeres: “Automáticamente me atrae la belleza; simplemente empiezo a besarlas. Es como un imán. Sólo beso. Ni siquiera espero. Cuando oss una estrella, te dejan hacerlo. Podés hacer cualquier cosa.”
“Ya no pensarán en el aborto”
Otro punto clave para estas elecciones, en particular para el sector femenino de la poblacion, es alrededor de la legislacion del aborto.
Durante su discurso en Pensilvania, el candidato dijo que, de ganar, las mujeres “ya no pensarán en el aborto”, debido a los “felices, sanas, confiadas y libres” que estarán.
A dos años de la anulación del caso Roe v. Wade, que el expresidente frecuentemente se jacta de haber revocado, la politica del aborto de Trump, en la cual cada estado puede legislar de forma propia, ha resultado en casi un tercio de los estados criminalizando la práctica del aborto de forma total.
Harris, en cambio, ha prometido proteger la interrupción voluntaria del embarazo con una ley federal, mientras que Trump ha asegurado que cree en las excepciones a las restricciones al aborto en casos de violación, incesto y peligro para la vida de la madre.
El nuevo muro
El expresidente también dedicó gran parte de su discurso a la inmigración, un tema en torno al cual ha basado su campaña. Volvió a insistir en sus oscuras descripciones de “asesinos” y otros “malvados” migrantes que cruzan la frontera con México y se apoderan de las comunidades locales.
En el encuentro, Trump también reiteró su postura sobre la deportación de migrantes haciendo referencias directas a ciudades como Springfield, en Ohio, cuya población haitiana se ha visto duramente estigmatizada por las declaraciones falsas del exmandatario. “El hecho es, y lo diré ahora, que hay que sacarlos de aquí. Hay que sacarlos”, dijo el magnate.
Trump presentó a su rival, la vicepresidenta Harris, como la instigadora de la crisis migratoria, al afirmar que lleva a Estados Unidos “en avión a miles y miles de migrantes de los lugares más peligrosos de la Tierra”.
“Si Kamala Harris gana estas elecciones, inundará las ciudades y pueblos de Pensilvania con inmigrantes ilegales de todo el mundo, y Pensilvania nunca volverá a ser la misma”, advirtió el candidato.