A partir de una investigación de la Justicia Federal de Campana, la Policía Federal Argentina desplegó el operativo “Rosario-Dubai” durante la madrugada del viernes y si bien implicó decenas de allanamientos, tuvo su epicentro en el barrio Empalme Graneros de Rosario, donde dentro de un galpón se encontraron más de 1.600 kilos de clorhidrato de cocaína de máxima pureza, que iban a ser exportados desde el puerto de Rosario hacia el emirato árabe. En total fueron 30 los allanamientos ordenados en diferentes provincias y se detuvo a 12 personas de una organización narcocriminal dedicada al tráfico internacional, en el marco de una causa que comenzó a investigarse hace seis meses. El material secuestrado sorprendió al vecindario de Génova al 2400 cuando se exhibieron en la calle los 1.535 paquetes que se encontraron en bolsas de alimento balanceado a base de maíz y rociadas con repelente para no ser captadas por perros rastreadores. Los responsables del operativo estimaron que el valor total de la sustancia secuestrada ascendería a 60 millones de dólares.
La información oficial indicó que agentes federales de la Dirección General de Hidrovías Paraná y de la División Operaciones Federales de la Superintendencia de Drogas Peligrosas secuestraron 1.658 kilos de clorhidrato de cocaína de máxima pureza que estaban “a punto de ser trasladados a los Emiratos Árabes” a través de la hidrovía. “Es una investigación de más de seis meses”, indicó el titular de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, Mariano Giuffra. “La organización tenía programado finalizar el tráfico internacional consolidando esta mercadería ilegal dentro de una carga legítima de expeller de maíz. Éste (por el galpón de Génova al 2400) era el lugar previo al embarque que tenían planeado desde el puerto de Rosario”, para principios de septiembre. “No pudieron redondear la operación justamente por este procedimiento”, dijo.
Los efectivos policiales, con apoyo del área de Narcocriminalidad de la Afip/Aduana, determinaron que la organización ocultaba la droga en dos galpones del barrio Empalme Graneros, en bolsones que contenían alimento balanceado a base de expeller de maíz (un residuo de la industria aceitera, resultante del prensado del grano de maíz o soja, de alto valor proteico). Además, estaba fraccionada en estuches que llevaban impresa la marca Louis Vuitton. En cuanto al origen, se planteó que ingresó al país “de forma ilegítima desde otros países productores de Sudamérica”.
Con las pruebas colectadas en la causa, el juez de Campana Adrián González Charvay ordenó los procedimientos en Rosario y Funes, Santiago del Estero, Villa María (Córdoba), Victoria (Entre Ríos), Bahía Blanca (Buenos Aires) y distintos puntos del conurbano bonaerense y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en los que se detuvo a “los 12 componentes de la organización”. Sobre el secuestro de los 1.535 panes de cocaína, se indicó que estaban “a la espera de ser disimulada en seis contenedores cargados con 150 toneladas de cereal que serían exportados desde el puerto de Rosario hacia la ciudad de Dubai”.
Más tarde, Giuffra señaló que los detenidos, sobre todo los organizadores, “son conocidos narcotraficantes con proyección al exterior” y “contactos globales”. En ese sentido, mencionó que “hubo intercambio de información con agencias internacionales en España y en Estados Unidos, a través de la DEA. Esa información seguirá siendo explotada para seguir con las investigaciones sobre las conexiones exteriores”, señaló.
El funcionario policial reveló que en la lista de sospechosos de integrar la banda hay una persona de nacionalidad colombiana. “Figura un colombiano investigado que no está detenido porque no está en el país”, aclaró. También dijo que “no hay persona que esté detenida en ningún instituto que tenga relación con este procedimiento”.
Giuffra mencionó además que “gracias al seguimiento que se hace cuando este tipo de investigaciones son conjuntas, no llegó a presentarse la documentación de despachos (para el traslado) porque hay instancias anteriores que fueron develando cuál podía ser el origen y el destino, y se pudo hacer el procedimiento que impide que se haya hecho algún trámite finalizando la exportación. La maniobra fue impedida”, dijo en LT8.
En cuanto al lugar desde el cual iba a salir la carga, el comisario mencionó “el Puerto de Rosario”, y que aunque no lo especificó se entiende que se refería a las terminales I y II de la ciudad, ubicadas desde avenida Pellegrini hacia el sur, porque es el único multipropósito de la región que opera contenedores. Ese puerto, que es público, está concesionado a una sociedad que integran Vicentin y la chilena Ultramar.
Además, indicó que “la mecánica de exportación de droga a través de medios comerciales usuales y legales es común. Están en la búsqueda de la perfección. Plantan empresas de forma muy compleja (armadas para la maniobra). Las constituyen aquí y en el exterior para poder hacer un intercambio comercial y dentro de esa operación se infecta la carga con este tipo de sustancias ilegales”.
Logo de Louis Vuitton
Los 1.658 kilos de cocaína encontrados en Empalme Graneros estaban ocultos con un mecanismo que calificaron como “complejo y sofisticado”, en bolsones usados para la exportación cerealera, conocidos como “big bags”.
Sobre los paquetes que tenían el logo de Louis Vuitton, Giuffra señaló: “La mayoría de los panes secuestrados tenían un logo similar a la marca. Usualmente, las organizaciones proveedoras usan este tipo de identificaciones para darles garantía de calidad a quienes adquieren estas sustancias para después hacer las exportaciones. Está en estudio y se tienen que analizar antecedentes”.
En octubre de 2014 un contenedor nacional que salió de Mendoza vía Chile con cajas de vino de distintas bodegas ocultaba 459 kilos de cocaína compactada en ladrillos que llevaban el logo de la marca Louis Vuitton, adentro de ocho bolsos de viaje que fueron hallados arriba de las cajas y cuyo destino fue Canadá.
Más secuestro
Además de la droga se secuestró dinero en efectivo, automóviles de alta gama, armas automáticas y dos utilitarios que poseían doble pared de fondo que los detenidos utilizaban para el traslado de los estupefacientes. Cabe destacar que uno de ellos, al momento del procedimiento, estaba cargado con otros 50 kilogramos de cocaína, los que se presumen habían sido dejados allí para ser utilizados en el tráfico local de la ciudad y la región.
Además, vecinos indicaron que en el galpón de Génova al 2400, que hace un año estaba siendo alquilado como depósito, previamente funcionó un astillero, como lugar de venta de puertas y aberturas de aluminio, y como un lugar donde se comercializaron autos. La propietaria se presentó ayer a la mañana en el lugar durante el operativo, dijo estar sorprendida e informó que el lugar lo alquilaba vía inmobiliaria “a un señor de Buenos Aires” desde hace aproximadamente un año, aunque no supo precisar el precio del contrato.
Los detenidos
Si bien en Rosario no se dieron los nombres de los detenidos, en medios nacionales trascendieron los nombres de Luciano Nicolás Argüello, Héctor Ernesto Pérez, Marco Rodrigo Páez, Lucas Eduardo Hitters, Gastón Sofía, Gabriel Nicolau, Oscar Rossi, Néstor Lombardi, Fabio Crucianelli y José Damián Sofía, apodado “El Tano”, con causas por narcotráfico y por amenazar en 2018 a la jueza Sandra Arroyo Salgado.