River cumplió con Táchira y es el mejor primero de la fase de grupos de la Copa Libertadores


La relación de los hinchas de River con el director técnico Martín Demichelis continúa lejos del acercamiento. Lo que ocurrió la semana pasada ante Temperley y Argentinos Juniors resultó decisivo, para que se viva otra noche de apatía sentimental.

La estrategia fue dar a conocer las alineaciones de los equipos 50 minutos antes del inicio del juego, teniendo en cuenta que el estadio todavía está semivacío en ese momento, y de esa manera cualquier rechazo cuando mencionen su nombre no sería tan estruendoso.

La voz en los altoparlantes llegó al momento de nombrar su apellido, después de los 23 futbolistas, y la silbatina se escuchó claramente desde los cuatros costados. El episodio fue uno más en ese vínculo que no termina de afirmarse, y parecía que se había restablecido algo con los triunfos seguidos ante Central Córdoba, Libertad y Belgrano.

Por su parte, el equipo jugó un primer tiempo aceptable, atacando permanentemente y generando muchas opciones para convertir, pero las malas resoluciones de las acciones por un lado, y presencia del arquero Camargo por otro lo impedían.

El empate se destrabó en el comienzo del segundo tiempo, cuando el colombiano Borja definió con el pie zurdo un envío desde la derecha de Solari. A partir de ahí, el ánimo de la gente cambió por completo, y todo se transformó en alegría y delirio. Colidio, en el medio del griterío, hizo estrellar una pelota en el travesaño

Los venezolanos no tuvieron poder de reacción y sólo trataban de contener el asedio permanente al que los sometía River. El desempeño se simplificó aún más cuando Jean Gutiérrez se fue expulsado por derribar a Borja, quien se iba derecho hacia el arco con chances de aumentar la diferencia.

Los tres puntos le permitían a River ubicarse como el mejor clasificado en el torneo, y con la oportunidad de definir como local las instancias siguientes. River tuvo otra explosión antes del final, cuando nuevamente Borja marcó el segundo gol con un toque suave abajo del arco, después de recibir la pelota de parte de Mastantuono.

El ingreso de algunos juveniles en River no resintió su esquema, y continuó siendo el dominador del juego. Mastantuono, Ruberto, y Subiabre sumaron minutos, junto a los más experimentados Barco y Simón.

El domingo próximo River se despedirá como local en este primer semestre, cuando reciba a Tigre por la Liga Profesional. Esa noche será también otra demostración de cómo persiste este enlazamiento entre los simpatizantes y Demichelis. Si bien los números respaldan al conductor, hay algo que no termina de convencer que impide una parentesco normal.