Ray Liotta, el actor famoso por interpretar al mafioso Henry Hill en “Goodfellas” (“Buenos muchachos”) y al beisbolista Shoeless Joe Jackson en “Field of Dreams” (“El campo de los sueños”) ha muerto. Tenía 67 años.
Un oficial en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses de República Dominicana, que no estaba autorizado a hablar con medios de comunicación, confirmó la muerte de Liotta y dijo que sus restos fueron llevados a la morgue Cristo Redentor. The Hollywood Reporter y NBC News citaron a representantes de Liotta quienes dijeron que falleció mientras dormía el miércoles por la noche en República Dominicana, donde estaba filmando una nueva película.
Lorraine Bracco, quien interpretó a Karen Hill en “Goodfellas”, tuiteó el jueves que estaba “completamente destruida por escuchar esta noticia sobre mi Ray. Puedo estar en cualquier parte del mundo y la gente viene y me dice que su película favorita es ‘Goodfellas’. Siempre me preguntan cuál es la mejor parte de hacer esa película y mi respuesta siempre ha sido la misma… Ray Liotta”.
Alessandro Nivola, quien recientemente actuó con Liotta en la película precuela de la serie “The Sopranos”, “The Many Saints of Newark” (“Los santos de la mafia”) escribió: “Me siento muy afortunado de haber compartido con esta leyenda en uno de sus últimos papeles. Las escenas que hicimos juntos están entre los puntos destacados de toda mi carrera. Era peligroso, impredecible, gracioso y generoso con su reconocimiento a los otros actores. Ha sido demasiado pronto”.
Seth Rogen, con quien actuó Liotta en la comedia de 2009 “Observe and Report” (“Cuerpos de seguridad”) tuiteó: “Era una persona tan adorable, talentosa y graciosa. Trabajar con él era una de las más grandes alegrías de mi carrera e hicimos algunas de las escenas favoritas en las que he estado. Una verdadera leyenda de inmensa maestría y gracia”.
Liotta, originario de Newark, Nueva Jersey, nació en 1954 y fue adoptado a los seis meses de un orfanato por una trabajadora municipal y un propietario de un negocio de autopartes. Liotta siempre asumió que era principalmente italiano, y el cine también. Pero más adelante en su vida, al indagar sobre sus padres biológicos, descubrió que de hecho era escocés.
Aunque creció enfocado en practicar deportes, incluyendo béisbol, durante su último año de bachillerato el maestro de teatro le preguntó si quería participar en una obra, a lo que accedió como diversión. Sin saberlo, esto planto una semilla, aunque él seguía asumiendo que terminaría trabajando en construcción. Más adelante, en la Universidad de Miami, eligió ingresar a actuación porque no requería materias de matemáticas. En entrevistas solía decir que comenzó a hacer audiciones para obras porque una chica guapa se lo pidió. Pero esto lo encaminó. Tras graduarse contrató a un agente y pronto tuvo su primer papel prominente en el melodrama televisivo “Another World”.
Le tomó varios años obtener su primer papel importante en cine hasta que llegó “Something Wild” (“Algo salvaje”) de Jonathan Demme en la que interpretó a Ray, el esposo exconvicto del personaje de Melanie Griffith. Tenía 30 años en ese entonces y no había tenido un trabajo estable en cinco años. En una entrevista de 1993 con The Associated Press dijo quería obtener el papel por sus propios méritos, a pesar de que conocía a Griffith. Cuando eso no funcionó llamó a Melanie.
“Odié hacerlo porque eso es política para mí, llamar a alguien para ayudarte. Pero de alguna manera me di cuenta de que de eso se trata todo”, dijo.
Su actuación le valió una nominación al Globo de Oro. Pocos años después, tendría el memorable papel del fantasma de Shoeless Joe Jackson en “Field of Dreams”. Aunque conmovió a muchos, la interpretación no vino sin sus críticas. Liotta recordó después escuchar a un anunciante de béisbol durante un partido de los Mets quejándose de que bateó del lado opuesto al que bateaba Joe Jackson.
“¡(Grosería) tú! ¡Él no regresó de la muerte tampoco!”, recordó pensar Liotta.
Su personaje más emblemático, como el mafioso de la vida real Henry Hill en “Goodfellas” de Martin Scorsese, llegó poco después. Pero no fue sencillo, Liotta y Scorsese tuvieron que pelear por él, con múltiples audiciones y promesas para el estudio para que eligieran al actor que seguía siendo relativamente desconocido.
“La cosa de esa película, sabes, es que Henry Hill no es un personaje tan atrevido”, dijo Liotta en una entrevista en 2012. “Realmente son los otros tipos los que están matando de verdad. La única cosa física que hace, cuando va tras el tipo que fue por Karen, a la mayoría del público le gusta realmente por eso”.
En la misma entrevista se maravilló de cómo “Goodfellas” tenía su “propia vida” y ha crecido a lo largo del tiempo.
“La gente la ve una y otra vez, y todavía responde a ella, y personas de diferentes edades vienen, incluso ahora, adolescentes, vienen ahora y me dicen que se sienten realmente conectados emocionalmente a ella”, dijo.
Sin importar el tamaño del papel, Liotta siempre logró destacar y robar escenas, ya fuera como el padre de Johnny Depp en “Blow” (“Inhala”) o como el optimista abogado de divorcio de Adam Driver en “Marriage Story” (“Historia de un matrimonio”).