Los organizadores de los Juegos Olímpicos de París 2024 recibieron este jueves de manera oficial las llaves de la villa donde se alojarán los deportistas durante las competencias, en una ceremonia en la que participó el presidente francés, Emmanuel Macron.
Durante julio y agosto, la villa recibirá a unos 14.500 atletas y su personal antes de darle la bienvenida a 9.000 para los Juegos Paralímpicos un mes después. De una extensión de 52 hectáreas, el complejo está situado al norte de París, cerca del estadio donde se disputó la final del Mundial 1998.
Tras la disputa de los Juegos, la villa se transformará en un barrio ecológico que beneficiará a 6.000 residentes y contará con dos escuelas, un hotel, un parque público, tiendas y oficinas, además de zonas con jardines para peatones y vehículos no motorizados. “Después de los Juegos, se convertirá en un verdadero barrio para los habitantes de Saint Denis”, declaró Macron.
Nicolás Ferrand, director general de SOLIDEO -la empresa encargada de las infraestructuras olímpicas-, expresó su satisfacción por lo conseguido: “Es una obra maestra de lo que puede hacer la industria francesa de la construcción”.
Ferrand entregó una llave simbólica de la villa al presidente de París 2024, Tony Estanguet, con lo que concluye oficialmente un periplo de siete años desde que se concedió a París la organización de los Juegos. “Estamos orgullosos del trabajo que hicieron, dentro del presupuesto y a tiempo. Nuestros atletas podrán vivir los Juegos en las mejores condiciones y ustedes han contribuido a cambiar la vida de los habitantes de la zona. Forman parte de una aventura que marcará nuestro siglo”, continuó Macron.
El mandatario saludó a Francia como una “nación de constructores”, al tiempo que recalcó que “lo que se ha hecho a tiempo y dentro del presupuesto mientras finalizamos la reconstrucción de Notre-Dame es nada menos que notable”. Está previsto que la iglesia de Notre-Dame vuelva a abrir sus puertas al público y a los servicios religiosos el 8 de diciembre de este año, después de haber sido renovada tras el incendio que la asoló en 2019.