La Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) realizó una jornada de asamblea y ollas populares en todos los distritos del país para discutir y definir las reivindicaciones de cara al paro y movilización del próximo 24 de enero convocado por la CGT. La jornada tuvo como epicentro un acto ante la sede del Ministerio de Capital Humano encabezado por el secretario general de la UTEP, Alejandro ‘Peluca’ Gramajo, que entregó un petitorio con reclamos. En paralelo también el Movimiento Evita realizó su propia “jornada de asambleas” con la convocatoria al paro.
“Para nosotros no se puede separar la ley ómnibus del mega DNU”, dijo Gramajo. “Ni de los anuncios del ministro (Luis) Caputo que estableció una mega devaluación del 118 %, que marcó el proceso inflacionario del 1% diario, aunque ahora construyan un relato de que frenaron la hiperinflación, el mismo Gobierno fue generando el proceso de inflación para que el ajuste lo paguen los trabajadores, la clase media y los jubilados”.
El dirigente también destacó el trabajo social que vienen desarrollando en las barriadas más pobres del país. “En estos barrios nosotros hemos podido realizar obras que le dieron dignidad a la gente, obras que alcanzaron a más de dos millones de personas y sin embargo en Gobierno pretende desfinanciar sacando el impuesto solidario al dólar y financiar ridículamente con multas a la legitima protesta social”. “Por todos estos motivos, por todos estos problemas, el próximo 24 vamos a movilizar con todas las organizaciones hermanas de la CGT y desde las dos CTA y desde la UTEP, para rechazar masivamente y en todo el país está ley y el DNU que va a condenar a la miseria definitivamente a todo el pueblo”, concluyó.
Antes de la jornada, Dina Sánchez, secretaria adjunta de la UTEP había convocado a las asambleas vía tuiter: “con fuerza a movilizar el 24 para derogar el DNU y la ley ómnibus” que el Ejecutivo envió al Congreso, expresó. Y recordó que la organización decidió “acompañar iniciativas de otros sectores”, como las dos CTA y la CGT, y articular acciones con movimientos feministas, campesinos, indígenas, jubilados y jubiladas, movimiento cooperativo y sectores PyME.