Un comisario de la Policía bonaerense fue asesinado de cuatro tiros por delincuentes que intentaron robarle la moto cuando esperaba a que su pareja saliera de trabajar en una farmacia de la localidad de Banfield, partido de Lomas de Zamora. Por el crimen hay un detenido, quien le confesó a su pareja que se mandó “una macana”. El hecho ocurrió el domingo a la noche, cuando el comisario Gustavo Romero (43), esoperaba a su esposa vestido de civil, en su moto. En esas circunstancias, varios delincuentes armados que también iban en moto intentaron robarle la suya, por lo que el comisario se resistió con su arma reglamentaria y, en medio de un tiroteo, fue atacado a balazos. La víctima era hermano de un policía federal también asesinado a balazos en un enfrentamiento con delincuentes en 2012 en Lanús.