El índice de tipo de cambio real que elabora el propio Banco Central perforó los 100 puntos
El índice de tipo de cambio real multilateral (ITCRM), un indicador que elabora el Banco Central (BCRA) para medir la competitividad del peso, perforó el viernes los 100 puntos, como había anticipado LA NACION: cerró en 99,9, lo que supone un nivel de apreciación para la moneda local similar al que tenía al comienzo de mayo de 2018, es decir, cuando se iniciaba la corrida cambiaria que tendría en vilo al país por dos años.
La señal de alerta, que se venía incubando lentamente por el amplio diferencial de inflación que tiene la Argentina respecto del resto de los países con los que comercia y el rezagado nivel de actualización que las autoridades habilitan para el tipo de cambio oficial (apoyadas en el supercepo), se terminó de corporizar en las últimas horas.
Fue por la sostenida tendencia a la apreciación que muestra el dólar a nivel global (al confirmarse que Estados Unidos se encamina a una suba de tasas más acelerada en los próximos meses) y la depreciación en simultáneo que habilitó China de su moneda, en un intento de no ceder competitividad.
El problema es que se agrandará tras la rueda de mercados del día, tomando en cuenta el avance extra del 0,7% que anotó el Dollar Index (se encuentra en 101,76, su máximo en más de 25 meses), y los nuevos repliegues que se anotaban el yuan (del 0,8% pese a que China ya anunció que desde medidos de mayo recortará la cantidad de divisas que los bancos deben mantener en 100 puntos básicos para intentar frenar su depreciación) y el real brasileño (cayó 1,5%), lo que presiona sobremanera la estrategia cambiaria del Gobierno.
Y que podría agravarse más, en los próximos días, si en los mercados no pone pausa la aversión al riesgo que se disparó sobre el cierre de la semana pasada.
El ITCRM mide el precio relativo de los bienes y servicios de la economía argentina con respecto al de los de los principales 12 socios comerciales que tiene el país, en función del flujo de comercio de manufacturas. “Se obtiene a partir de un promedio ponderado de los tipos de cambio reales bilaterales de los principales socios comerciales y considera la evolución de los precios de las canastas de consumo representativas de los socios comerciales expresados en moneda local en relación con el valor de la canasta de consumo local, constituyéndose como una de las medidas amplias de competitividad”, explica el BCRA en referencia a los criterios que guían su elaboración.
Ponderado por el comercio de manufacturas (promedios móviles 12 meses) inciden básicamente en su resultado Brasil (32%); la Eurozona (19%), China (16%) y Estados Unidos (12%). De allí que los movimientos que registren esa monedas con determinantes sobre la competitividad cambiaria local.