Desde Montevideo
La rambla de Ciudad Vieja se colmó de banderas con los colores rojo, azul y blanco, enarboladas por una multitud de fervorosos simpatizantes. La fiesta no era para menos: el Frente Amplio (FA) ganó el balotaje en Uruguay y, con su vuelta al poder, América latina se vuelca más a la izquierda. Yamandú Orsi se imponia con el 52,1% de los votos frente al derechista Álvaro Delgado con el 47,9%,del Partido Nacional, según la Corte Electoral (escrutado el 99% de los sufragios).
El FA regresa después de cinco años de un ensayo promercado que interrumpió su hegemonía de 15 años. Casi a las 22 horas, Orsi se dirigió a un público masivo que lo esperaba bajo una lluvia suave. “Hoy triunfa el país de la libertad y fraternidad. Jamás hay lugar para el agravio y la descalificación. Estamos muy felices quienes abrazamos estas banderas. Hay una parte del pueblo que también precisamos”.
Diálogo nacional
El discípulo de José “Pepe” Mujica dijo que su mensaje era claro: “no puede ser otro que debatir ideas” y se congratuló por la larga vida de los partidos políticos uruguayos. “Voy a ser un presidente que convoque una y otra vez al diálogo nacional. Voy a ser un presidente que construya una sociedad más integrada. Un país que camine hacia el desarrollo, que avance. Abracemos la idea de que Uruguay es uno solo”.
Antes, a las 21.30 horas, Delgado había reconocidó el triunfo de Orsi. A sus seguidores les dijo: “Nosotros no estamos derrotados. Acá hay una coalición que integran cinco partidos que vino para quedarse. Acá nadie va a tener mayoría en el Parlamento. Vamos a tener una actitud republicana. Yamandú tiene la llave de encontrar los acuerdos”.
El candidato de la derecha se refería a que el Frente Amplio recuperó el control en el Senado pero no logró la mayoría en Diputados – obtuvo 48 bancas de un total de 99.
Vibra la rambla
La rambla de Montevideo vibraba con los festejos. También hubo palabras emotivas de la electa vicepresidenta. “Volverá la alegría a enredarse con tu voz”, dijo Carolina Cosse. La exintendenta de Montevideo se dijo orgullosa del Frente Amplio. “Vamos a construir un rumbo progresista para el Uruguay y vamos a unir al país”.
Cosse dijo tiempo atrás a esta cronista que el gobierno de Lacalle Pou desandó el camino que inició Tabaré Vázquez en 2005. “Se desmantelaron algunos pilares de nuestra esencia. Nosotros logramos acceso universal a la salud y de calidad; logramos una matriz de telecomunicaciones de primer nivel mundial; cambiamos la matriz eléctrica a fuente renovable prácticamente en su totalidad e invertimos en educación”.
Para el analista Diego Buquet, el Frente Amplio logró captar para esta segunda vuelta un 10 o 15 por ciento de voto del Partido Colorado, que forma parte de la coalición gobernante. “Orsi apuntó al electorado más progresista dentro de la coalición, hizo referencias a Batlle y Ordóñez, un líder colorado progresista. También logró conectar con las personas que están más insatisfechas con el actual gobierno, que deja un legado de indicadores mediocres. Y otro dato es que el voto en blanco disminuyó respecto de la primera vuelta”, explicó a PáginaI12
Ya desde temprano, en el barrio céntrico del Cordón prevaleció el apoyo al Frente Amplio, según los testimonios recabados por varios colegios. Como el de Erica Pintos, de 36 años, administradora de empresas que ya tenía decidido el voto por Orsi. “En plena pandemia quedé sin trabajo y mi compañero también. Desde el Estado no tuvimos ninguna ayuda. Soy asmática y era paciente de riesgo y había un libre albedrío en la calle, me tuve que encerrar. Yo creo que se tomó todo muy a la ligera.”
El gobierno de Lacalle Pou tuvo un desempeño aceptable al inicio de la pandemia pero al final la conclusión no fue buena, según explica a Página/12 Camilo López Burian, politólogo y profesor en la Universidad de La República. “El gobierno no estaba dispuesto a asumir las recomendaciones de los científicos si amenazaban con ir en contra del discurso ideológico liberal. Lacalle Pou apeló a la ´libertad responsable´y aumentó el impuesto a los altos ingresos del Estado, no tocó al mundo privado”. López Burian agrega: “el gobierno recibió un Estado sólido, con una protección social robusta”.
Paula Vázquez, de 43 años, salió de votar y afirmó que su ideología iba más con la del Frente Amplio. “Comparto más el pensamiento, las propuestas, la forma de vida, del Frente, de la izquierda, toda la parte del abordaje de lo social, de la salud, de la educación”. La médica pediatra sostuvo que “se han visto más demoras en las salas de atención de salud, se ha visto más disminución de los recursos en cuanto a medicación, el acceso a la paraclínica mucho más demorada”, pero así y todo cree que cinco años es poco para destruir las cosas que están bien hechas.
En Pocitos, zona paqueta de Montevideo, Milagros, una abogada que pidió no poner su apellido “porque trabajo en una multinacional”. votó por Delgado. “Ha sido un excelente gobierno en manejo de pandemia, nivel educacional y suba de empleabilidad”. Otra letrada de nombre Adriana Calvo coincidió con su voto blanco. “Yo voto a Delgado porque quiero la continuidad de este gobierno, que para mí fue muy bueno. En todo, el tema de la covid-19, mejoró la seguridad, a pesar de que dicen que está mal en este momento, pero es más que nada por narcotráfico, ¿no? A nivel social está mucho mejor el país, por los menos desde lo que opinan países como Argentina, que siempre nos felicitan por este gobierno”.
Al final del día, estaba claro que una mayoría de este lado del charco volvía a apostar por un proyecto que promete mejorar las condiciones de vida de los más postergados.