La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, alcanzó el apoyo de suficientes delegados como para garantizar su nominación en el Partido Demócrata como candidata a las elecciones presidenciales de noviembre, al tiempo que comenzó este martes su campaña con un acto en Milwaukee donde arremetió contra su rival republicano, el expresidente Donald Trump.
El congresista de California, Robert Garcia, fue el primero en anunciar el apoyo de los delegados. “California acaba de votar unánimemente para nominar a Kamala Harris para presidenta. ¡Nuestros delegados pusieron a la vicepresidenta por encima del número requerido que necesita para ser nuestra nominada para la convención!”, escribió en una publicación en redes sociales.
El apoyo a la vicepresidenta se suma a la recaudación de más de 81 millones de dólares en solo 24 horas tras el anuncio del presidente, Joe Biden, de no buscar la reelección, marcando un hito en la actual campaña presidencial estadounidense.
El proceso de nominación
Para ganar la nominación en la primera vuelta de la votación, un candidato necesita el apoyo de al menos 1.976 delegados de un total de 4.000. Las promesas de apoyo por parte de los delegados son una muestra simbólica de aval a Harris, puesto que los delegados podrían cambiar de opinión de aquí a la votación en agosto. Harris no se convertiría oficialmente en la candidata presidencial del partido hasta que los delegados voten formalmente en una votación nominal virtual que se espera concluya el 7 de agosto.
La vicepresidenta ya es la candidata favorita de los demócratas tras haber recibido el apoyo del propio presidente Biden, la expresidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y todos los gobernadores demócratas del país. Sin embargo, se podrían presentar otros candidatos que consigan las firmas de nominación de al menos 300 delegados, y no más de 50 de un solo estado.
Si solo un candidato, con toda probabilidad Harris, alcanza el umbral de 300 firmas, la votación virtual podría tener lugar tan pronto como el 1 de agosto, dijeron funcionarios del partido a medios locales el lunes, y si hay varios candidatos, la votación se llevaría a cabo días después, pero se completaría antes del 7 de agosto. En tanto, si la nominación se produce a principios de agosto, la convención demócrata que se celebrará el 19 de agosto en Chicago, será una función puramente ceremonial.
Acto en Milwaukee
Mientras tanto Harris, se metió de lleno en la campaña con un acto en Milwaukee, donde recordó su trayectoria como fiscal, incluida su labor como fiscal general de California, para compararse contra Trump, y prometer que lo hará rendir cuentas. “Como fiscal, me enfrenté a delincuentes de todo tipo: aquellos que abusaban de mujeres, estafadores que engañaban a consumidores, tramposos que violaban las normas para beneficio propio. Así que escúchenme bien: conozco a los tipos de la naturaleza de Trump”, manifestó.
Sus palabras fueron recibidas con ovaciones por las 3.000 personas, según el recuento de la campaña, que se reunieron en un instituto de Milwaukee. Los asistentes recibieron a Harris visiblemente emocionados, aplaudiendo y coreando su nombre: “¡Kamala, Kamala!”.
Uno de los momentos más emotivos se produjo cuando Harris empezó a enumerar algunas de las políticas que Trump podría implementar si regresa a la Casa Blanca, como restricciones al acceso a cuidados sanitarios para quienes tienen enfermedades crónicas como el asma, algo que eliminó la reforma sanitaria de Barack Obama (2009-2017).
“Estados Unidos probó estas políticas económicas fallidas antes, pero no vamos a retroceder. No vamos a volver atrás. Les diré por qué no retrocederemos, ¡porque la nuestra es una lucha por el futuro!”, exclamó Harris, provocando una reacción instantánea del público. “¡No vamos a volver atrás!”, “¡no vamos a volver atrás!” corearon en respuesta los asistentes con tal entusiasmo que la vicepresidenta se vio obligada a hacer una pausa, sonriendo ante la efusividad de la multitud.
En todo momento, la candidata intentó marcar un claro contraste con Trump. Destacó cómo ella se dedicó a poner a criminales en la cárcel durante su trayectoria como fiscal que culminó con el cargo de fiscal general de California (2011-2017), mientras que Trump en abril pasado fue declarado culpable de 34 cargos por falsificar registros comerciales para ocultar una relación con la actriz Stormy Daniels.
Las encuestas
Los últimos sondeos sobre los comicios presidenciales en Estados Unidos muestran números ligeramente mejores para la vicepresidenta, aunque también, al igual que el presidente Joe Biden, perdería las elecciones contra el republicano Donald Trump. Estas encuestas se realizaron antes del anuncio del domingo de Biden de renunciar a la reelección, por lo que preguntados por Harris, los encuestados respondían a una situación hipotética.
La más reciente, la encuesta de YouGov para CBS News, daba a Trump cinco puntos de ventaja sobre Biden (52% a 47%) por solo tres sobre Harris (51% a 48%). Otra de NBC News daba la misma ventaja de dos puntos para Trump (45% a 43% con Biden y 47% a 45% con Harris), mientras que una de Fox News daba idéntico resultado de 49% a 48% en favor del expresidente independientemente del rival.
El sondeo de Marist para NPR y PBS era el único que daba mayoría al binomio demócrata y, en este caso, daba una mejor ventaja a Biden sobre Trump (50% a 48%), que a Harris sobre Trump (50% a 49%).