La aparición de dos casos de fiebre hemorrágica argentina en la ciudad de San Jorge durante las últimas semanas, sirvió de argumento para que las autoridades sanitarias de la Subregión San Martín del Ministerio de Salud de Santa Fe insistieran con la recomendación sobre cumplimentar la vacunación contra la enfermedad que es endémica en las provincias de Santa Fe, Buenos Aires, Entre Ríos y La Pampa.
“En las últimas semanas tuvimos dos casos de personas diagnosticadas con fiebre hemorrágica argentina que afortunadamente evolucionaron muy bien tras la aplicación de plasma”, explicó el coordinador del organismo sanitario, Diego Brigalia a La Capital.
“Si bien estamos en una zona endémica, cada vez que aparece un caso la gente se alarma. Sin embargo, es una enfermedad que si se aborda a tiempo o teniendo la vacuna, es perfectamente controlable. No es una cuestión para alarmarse, sino para ocuparse”.
La fiebre hemorrágica o mal de los rastrojos es una dolencia que se contrae al estar en contacto con la orina o las heces de un roedor infectado, por esa razón quienes realizan trabajos en la zona rural son quienes están más expuestos. Sin embargo, existe la vacuna Candid 1 que está incluida en el calendario nacional de vacunación y que deben aplicarse todas las personas desde los 15 a los 65 años y en ese rumbo apuntan las recomendacinoes oficiales.
Prevención
“Cuando se detectó el primer caso en San Jorge, hicimos un rastrillaje en el barrio donde residía y pudimos inocular a más de cien personas que no tenían la vacuna que es de dosis única y está incluida en el calendario nacional”, explicó Brigalia y aclaró que “aunque el contagio pueda haberse dado en otro lugar, una vez que se detecta se trata de encontrar un posible foco de contagio, es decir algún nido de ratas o lugar donde puedan circular”.
Finalmente el coordinador de la Subregión de Salud insistió en que las personas adultas revisen sus carnés de vacunación o que concurran al hospital o Samco de su localidad para verificar si poseen la vacuna.
Síntomas
Las personas que padecen la enfermedad manifiestan dolores musculares, cansancio y fiebre y al diagnóstico se llega a través de un análisis de sangre, por eso es importante la consulta médica cuando aparecen los síntomas. El tratamiento incluye el uso de plasma donado por personas que ya cursaron la enfermedad.
Entre otras indicaciones, para evitar contagios desde el Estado recomiendan mantener una higiene cuidadosa, principalmente de las manos y cambio de ropas, cada vez que se hayan frecuentado zonas que pueden albergar roedores.
También se debe evitar introducir tallos, hojas o granos en la boca; no acostarse sobre bolsas o en el suelo y comer y dormir en habitaciones limpias; usar calzado cerrado; mantener desmalezados los alrededores de la vivienda para evitar que las lauchas se acerquen a ella; disponer de lugares libres de maleza para los juegos de niños.
También se remarca la necesidad de no destruir la fauna depredadores de roedores, tales como lechuzas, lechuzones, zorros, gatos, chimangos y otras aves rapaces.