Los días pasan y comienzan a aparecer datos alrededor de lo que fue el secuestro y asesinato de Lorenzo “Jimi” Altamirano, el músico y artista callejero baleado en la puerta del estadio de Newell’s el miércoles 1º de febrero. Los fiscales que investigan el caso confirmaron que la víctima era ajena a los conflictos que se asoman como trasfondo del crimen. Hay cámaras de vigilancia que lo captan con vida 15 minutos antes de que lo asesinaran.
“Jimi” fue asesinado la noche del miércoles en Morcillo al 2600, a metros de la puerta 6 del estadio Coloso Marcelo Bielsa. Hasta ese punto llegó un Renault Sandero desde el cual al menos un hombre bajó a la víctima por la fuerza y lo mataron con tres disparos. Entre sus prendas la policía halló una hoja con un mensaje escrito dirigido a personas vinculadas a Los Monos y a la barra brava de Newell’s.
Desde un principio se conectó el hecho a una posible disputa entre bandas con el trasfondo de los intereses que conectan al paravalancha con negocios criminales en distintos puntos de la ciudad. El misterio quedó en la víctima: rápidamente se supo que el muchacho no tenía vinculaciones con la hinchada leprosa ni con alguna organización criminal. Así fue que como principal hipótesis se posicionó una sospecha que implicaría un caso inédito en la ciudad: “Jimi” fue levantado al voleo, secuestrado y asesinado solo para utilizar su cuerpo como portador de un mensaje.
El caso
Lo que se sabe hasta el momento es que “Jimi” era ajeno a las disputas que pueden aparecer como trasfondo de su crimen. Él era músico, técnico electricista y malabarista callejero. Tenía un objetivo a corto plazo: poder viajar a Brasil, adonde ya había ido en otras ocasiones y donde tenía un grupo de amigos que lo esperaba. Lo último que hizo antes de ser asesinado fue ir a ensayar con una de las bandas en las que tocaba el bajo.
El miércoles 1º de febrero, pasadas las 21, salió con sus amigos de la sala de ensayo ubicada en la zona de Gálvez y Oroño. Algunos acompañaron a una de las integrantes del grupo a tomar el colectivo y luego se separaron. “Jimi” vivía en Lima y 27 de Febrero, y para ese lado encaró a pie. Hay imágenes de una cámara de vigilancia que lo capta en 27 de Febrero y Ovidio Lagos, caminando por la estación de servicios de esa zona a las 22.32.
A las 22.48 las cámaras de la zona del estadio de Newell’s muestran cuando pasa un Renault Sandero negro y según fuentes policiales las mismas capturan el momento en el que una persona intenta hacer bajar del auto a “Jimi”, lo balean y lo dejan tirado sobre la calle. Otra cámara registró el momento en el que el auto escapa a toda velocidad por Presidente Perón en dirección al oeste. Lo que por ahora es una incógnita es qué pasó en esos 15 minutos que transcurren entre que lo vieron caminando y cuando lo bajan del auto para matarlo. El informe final de la autopsia podrá establecer si, además de los disparos, hay marcas de violencias que puedan confirmar que “Jimi” fue subido al auto por la fuerza.
Minutos después de concretado el crimen el Renault Sandero fue hallado incendiado en Latzina al 2900, barrio Carlos Casado y a pocas cuadras del Parque Independencia. Los investigadores constataron que tenía pedido de captura por un robo ocurrido el 29 de enero en Cochabamba al 45 bis.
“No naturalizar”
En un primer momento la investigación quedó a cargo del fiscal Ademar Bianchini, de turno por esos días en la Unidad de Homicidios, pero luego pasó a la agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos. Es que las características del hecho, y una serie de sucesos violentos que aparentan estar vinculados a la misma saga, ameritan la conexión de distintas investigaciones. Así, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra tomaron las riendas de la pesquisa y este lunes brindaron una conferencia de prensa en el Centro de Justicia Penal.
“Una persona elegida al azar para mandar un mensaje”, dijo el fiscal Edery para confirmar así que Altamirano fue levantado al voleo y asesinado con el fin de que en el hallazgo de su cuerpo se encontrara también una nota dirigida a personas que están presas. “La verdad es que no encontramos ninguna razón, la línea más fuerte es que lo levantaron en una esquina y a los minutos lo ultimaron frente a la cancha”, agregó Schiappa Pietra.
Los fiscales Edery y Schiappa Pietra en la conferencia de prensa en el Centro de Justicia Penal, donde hablaron sobre el crimen de Lorenzo “Jimy” Altamirano.
“Nunca nos tocó un caso de esta naturaleza, nos hace perder cualquier tipo de límite sobre lo que está pasando en la ciudad”, agregó el fiscal. En ese sentido remarcó: “Cuando se escucha a funcionarios de distintos órdenes del Estado que hablan de no naturalizar, pido que actuemos en consecuencia. No naturalizar implica tomar medidas para asumir lo que está pasando. “Es un caso que otra vez ha movido el límite. Estas situaciones de violencia avanzan, vemos que el limite se corre y es preocupante. Exige que todas las instancias del Estado, tanto ejecutivo, legislativo como judicial tomen conciencia de lo que está pasando”, sostuvo Edery por su parte.
El trasfondo
“Damián Escobar, Leandro Vinardi y Gerardo Gómez dejen de sacar chicos del club para tirar tiro en Rosario”. Ese mensaje encontraron los peritos de la policía entre las prendas de “Jimi” Altamirano. Al menos de las primeras dos personas mencionadas en ese mensaje se sabe que están presos, por homicidios y causas de drogas, y ligados a la banda narco Los Monos y a una de las facciones de la barra brava de Newell’s. Sin embargo los fiscales toman con cautela esa pista. “El tenor de los carteles hay que tomarlos con mesura, porque muchas veces se usan para tirar los hechos a otra banda”, explicó el fiscal Edery.
En ese marco es que la agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos reunió hechos que ocurrieron en distintos momentos y lugares pero con la posibilidad de que se unan en la misma trama. “Aglutinamos una serie de causas que entendemos que están vinculadas con este homicidio y estamos por ahora desarrollando esta línea de investigación”, explicó Schiappa Pietra.
Entre esos casos figura la balacera contra la subcomisaría 26º de Villa Gobernador Gálvez, un hecho que ocurrió minutos antes del crimen de Altamirano. Fue sobre las 22 del miércoles, en la dependencia de Nahuel Huapí y Pellegrini, cuando según fuentes policiales dos hombres en moto balearon la seccional y dejaron un mensaje. El mismo variaba en uno de los destinatarios pero iba sobre la misma advertencia: “Dejen de sacar los pibes del club a tirar tiros en Rosario”.
Con este telón de fondo los investigadores buscan establecer si hay conexión con otro hecho violento ocurrido hace dos semanas en inmediaciones del estadio de Newell’s. Fue el jueves 26 de enero, cuando dos personas desde una moto balearon a un hombre de 37 años que manejaba un Audi A5 por Ovidio Lagos y Jorge Cura. La víctima, según relató, había salido de comer un asado con amigos en el sector de los parrilleros de Newell’s y está vinculado a la barra brava.
También analizan la posible vinculación con dos balaceras ocurridas la noche del viernes pasado. Una fue contra una sede la zona sur de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y la otra contra el edificio del Sindicato de la Carne de Rosario, ubicado en Avenida del Rosario al 400 bis, también el sur de la ciudad. En la primera los autores del ataque dejaron un mensaje: “Eric Mancini y Leandro Vilches dejen de pasarle a los fiscales y dejen de tocar a gente inocente, manga de policías HDP. Pasamos la cabida que vos quieras”. Se trata de dos personas presas por narcotráfico cuyos nombres también aparecieron en un cartel hallado en la escena del crimen de Brian Alvarez, asesinado a balazos el 24 de enero en Gallegos al 1100.
El aguante
Horas después de que se diera a conocer el asesinato de “Jimi”, sus amigos del ambiente de la música organizaron una colecta solidaria para ayudar a la familia con los costos del sepelio. Entonces avisaron que iban a realizar una serie de actividades para acompañar a los padres de “Jimi” y exigir justicia y esclarecimiento del hecho.
Familiares y amigos de Jimi Altamirano, asesinado frente al estadio de Newell’s, reclaman esclarecimiento del hecho frente a los tribunales. Foto Marcelo Bustamante / La Capital
En ese marco fue que convocaron a una movilización que se realizó el domingo por la tarde y a la cual acudió un centenar de personas. Se reunieron en la esquina de Oroño y 27 de Febrero y marcharon hasta el estadio de Newell’s.
Este lunes en el Centro de Justicia Penal (CJP) los fiscales se reunieron con los familiares de “Jimi” y tomaron testimonios a algunas personas que lo conocían y el día del crimen estuvieron con él hasta que se fue solo rumbo a su casa. En ese marco sus allegados se concentraron en la puerta del CJP para seguir acompañando a la familia Altamirano.
“Lo que tratamos es que se viralice, que la causa llegué a la gente común más allá de los amigos y familiares. Que la gente tenga empatía con nosotros, porque puede pasarle a cualquiera”, contó a La Capital un amigo de “Jimi”. “Queremos que la causa no se guarde en un cajón. Esto es responsabilidad del narcoestado en el que vivimos, queremos que se haga justicia por “Jimi” y por todos los pibes que han caído en manos de esto”, agregó.