Otra vez campeón de América y otra vez en Brasil. Argentina lo hizo de nuevo, aunque esta vez, fue la Selección Argentina de básquetbol la que le ganó la final de la AmeriCup al conjunto brasileño por 75-73 y dio la vuelta olímpica después de 11 años en el plano continental.
Después de un largo camino de 38 días entre preparación y competencia, incluyendo un fuerte sacudón como fue el cambio de entrenador a dos días del inicio del torneo, con la llegada de Pablo Prigioni en reemplazo de Néstor Che García, el equipo nacional mostró actitud, espíritu competitivo y corazón para llevarse su premio.
Fue una definición vibrante y digna de un clásico entre Argentina y Brasil la que se vivió en Recife, sede del certamen.
Argentina dominó con solidez el primer tiempo y hasta llegó a sacar 15 puntos de ventaja. Sin embargo, en el último cuarto, donde el conjunto nacional no pudo anotar hasta promediar el parcial, Brasil llegó al empate en 67. Luego, Lucas Díaz anotó un triple y puso al frente al local, pero el conjunto nacional recuperó el dominio en el marcador con dos tiros libres de Gabriel Deck. Otra vez, Lucas Díaz puso al frente a Brasil, sin embargo, Marcos D’Elia la volcó tras un gran pase de Facundo Campazzo, y seguidamente, Deck -que fue el MVP de la final y goleador argentino- marcó el 75-73 sobre el cierre de la posesión. A falta de 16.1 segundos, el ataque brasileño no prosperó y Argentina desató la fiesta.
Es la tercera vez en la historia que Argentina levanta la copa en este torneo, luego de las conquistas de Neuquén 2001 y Mar del Plata 2011.