Mientras la vicepresidenta Cristina Kirchner afronta el juicio oral por presuntos delitos con la obra pública en Santa Cruz, el juez Juan Ramos Padilla y el dirigente peronista porteño, Jorge Rachid, llevaron a cabo una marcha en Parque Centeneario, el corazón de la Ciudad de Buenos Aires, en defensa de la exmandataria y en reclamo de “una Justicia independiente”.
En este sentido, los organizadores llamaron el “cristinazo”, por las miles de personas que se acercaron a reclamar el fin del “lawfare” y construir “una Justicia que sea imparcial imparcial”.
De este modo, Rachid comentó: “A diferencia de los adversarios políticos, los que asistieron a esta convocatoria no están movilizados por el odio sino por un profundo amor a Cristina”, en diálogo con Noticias Argentinas y anticipó que se trató de “la primera de un proceso de plazas movilizadora que se realizarán cada 15 días”.
Además, agregó: “Mucha gente también se movilizó por la impotencia que produce saber que están deteriorando la democracia que tanto nos costó conseguir y que esta Corte Suprema está dispuesta a ser la cabeza golpista de un proceso institucional”, y puntualizó: “Dentro de 15 días se va a repetir en Parque Chacabuco, el próximo 27 de agosto a las 12. Nuestra consigna es las plazas de las doce para cortar a la Corte”.
De este modo, consideró que la convocatoria de este sábado “tuvo una muy buena repercusión”, y afirmó que “había miles de personas”: “Según dijo la Policía de la Ciudad, se calculan cerca de 7 mil personas. Es una experiencia interesante porque nosotros convocamos desprovistos de cualquier situación de especulación y alejados del calendario electoral”, detalló.
“La verdad es que la multitud que se juntó nos llenó de emoción y dejó de manifiesto la necesidad que hay en el pueblo argentino de expresarse, porque pareciera que existe una mordaza comunicacional donde no se explica nada de lo que se está haciendo en medio de la devastación que hubo en 4 años de macrismo y destrucción de soberanía”, continuó.
Ante esta situación, criticó puntualmente al máximo tribunal de justicia: “Cuando sale una resolución que afecta intereses que le son propios, la Corte se aboca inmediatamente y lo resuelve en 48 horas, porque es corrupta y criminal”, indicó. En tanto, Ramos Padilla expresó que “en la Argentina la democracia está herida por esta Justicia”.
Asimismo, remarcó que desde el sector judicial “vienen atacando” a la vicepresidenta. “Gracias Cristina”, “Fuera jueces corruptos”, “No fue magia” y “Todos con Cristina” fueron las leyendas que replicaban los carteles durante la movilización, la cual concluyó: “Che gorila, che gorila, no te lo decimos más, si la tocan a Cristina qué quilombo se va a armar”.