Luego de que se identificaran los cuerpos del periodista británico Dom Phillips y el experto indigenista Bruno Pereira, las autoridades de Brasil dieron a conocer los resultados de la autopsia y revelaron cómo fueron asesinados.
Ambos murieron tras haber sido alcanzados por “municiones típicas de caza” en el Amazonas brasilera, de acuerdo con la información que difundió AFP. Phillip recibió un disparo en el tórax mientras que Pereira murió por tres tiros, uno de ellos en la cabeza.
De igual forma, los restos del experto todavía están siendo analizados, por lo que se esperan más precisiones para las próximas horas. Mientras tanto, las autoridades continúan con la investigación para dar con todos los implicados en el asesinato luego de que un tercer sospechoso se entregara a la policía.
Asesinato en Brasil: lo que se sabe hasta el momento
Phillips y Pereira fueron vistos por última vez el pasado 5 de junio cuando se dirigían a la ciudad de Atalaia do Norte en barco, para avanzar con su investigación sobre la conservación del medio ambiente.
Tras semanas sin noticias, las autoridades iniciaron la búsqueda del periodista y el indigenista, pero el viernes 17 de junio se encontraron con el peor escenario.
Los restos de ambos están en un área que había sido señalada por Amarildo da Costa de Oliveira, primer sospechoso detenido que confesó haber enterrado los cuerpos dentro de la selva.
La zona se encuentra cerca de la frontera con Perú y es comúnmente conocida por su peligrosidad, puesto que operan narcotraficantes, así como también pescadores y mineros ilegales. De igual forma, los investigadores no están seguros de que el asesinato esté relacionado con las bandas narcos.
La hipótesis de la policía
El comisario de la Policía Civil, Alex Pérez Timóteo, aseguró a la prensa que “no hay duda de la participación de los tres en el doble homicidio” y afirmó que “es probable” que se realicen más detenciones durante los próximos días.
Las autoridades avanzan con diferentes hipótesis dentro de las que se encuentran una eventual conexión con la pesca ilegal, un negocio que los expertos aseguran que se utiliza para blanquear dinero de la droga.
Debido a la gravedad del tema, la causa obtuvo rápidamente visibilidad internacional. Al respecto, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró que las víctimas incursionaron en una “aventura no recomendable” y que el reportero “era mal visto” en la región por informar sobre actividades ilegales, lo que generó indignación en todo el mundo.