La película animada de Disney-Pixar “Lightyear”, centrada en el guardián espacial Buzz Lightyear de la saga de “Toy Story”, no se estrenará en 14 países debido a las políticas homofóbicas que allí rigen. El film, que llega a las salas argentinas este jueves, tiene una escena en la que dos personajes femeninos se besan.
La Oficina Reguladora de Medios de Emiratos Árabes Unidos informó a través de un comunicado que “Lightyear” no cuenta con el permiso de exhibición en todas las salas del país “debido a que viola los estándares de contenido en medios”. A la prohibición se sumaron, entre otros, Kuwait, Indonesia, Egipto, Líbano y Malasia, países en los que la homosexualidad aún es considerada un delito.
La postura de Disney y Pixar
Los productores del estudio cinematográfico se negaron de manera rotunda a cambiar o eliminar la escena.
“Nosotros en Pixar hemos sido testigos de cómo bellas historias, llenas de personajes diversos regresan de la revisión corporativa de Disney en una versión reducida a las migajas de lo que fueron”, expresaron los productores al momento de enviar el informe de revisión del contenido al CEO de Disney, Bob Chapek.
La empresa evitó directamente enviar la película a países como Arabia Saudita a sabiendas de que sería rechazado; en tanto que aún se espera la respuesta de China.
“No vamos a eliminar nada, especialmente algo tan importante como la relación amorosa e inspiradora que le muestra a Buzz lo que se está perdiendo por las decisiones que toma, así que eso no se eliminará”, había advertido la productora Galyn Susman en la alfombra roja del preestreno de la película en Londres.
Por su parte, Chris Evans, el actor que pone la voz al guardián espacial, señaló que “es genial que seamos parte de algo que implica un avance en la inclusión social”, pero que “es frustrante que todavía existan lugares que no estén donde deberían”.
Disney y la comunidad LGBTIQ+
En mayo, Disney ya se había negado a recortar escenas que mostraban a un matrimonio lésbico en la película de Marvel “Doctor Strange: Multiverse of Madness”. Países de medio oriente, como Arabia Saudita, decidieron no exhibir el filme.
Esto sucede en medio de reclamos hacia el actual CEO de Disney, Chapek, quien evitó rechazar abiertamente una ley que sancionó el estado de Florida conocida con el nombre de “Don’t say gay” (“No digas gay”). La ley prohíbe que en las escuelas primarias se aborden temas vinculados a la diversidad sexogenérica.
Trabajadores de Disney organizaron una protesta frente al estudio cinematográfico en apoyo a la comunidad LGBTIQ+.