Ayer se realizó el paro nacional universitario con una adhesión del 95 por ciento en todo el país, es el primero de los tres que definió el Frente Sindical, integrado por gremios docente y no docentes, en reclamo por la apertura de la paritaria y el aumento de los fondos en el Presupuesto 2025. Además, en facultades de varias provincias como Mendoza, San Luis, La Pampa y Corrientes, entre otras, se hicieron actividades para visibilizar el conflicto con el Gobierno Nacional, que se niega a rever su postura y escala en los ataques verbales. En Tucumán, estudiantes y docentes hicieron clases públicas y una movilización masiva a Plaza Independencia para repudiar la violencia de la policía provincial, que el miércoles desalojó una clase con el aval del gobernador Osvaldo Jaldo.
Todos los gremios que integran el bloque coincidieron en que la adhesión al paro nacional fue muy alta. Paralelamente, los estudiantes, sobre todo de las provincias, siguieron con las medidas. El reclamo es por la recomposición salarial, que lleva una pérdida del poder adquisitivo del 63 por ciento, el pago de la garantía salarial (que el Ministerio de Capital Humano anunció hace dos semanas y aún no realizó) y la restitución del Fondo de Incentivo Docente. En algunos casos, la adhesión fue total como en la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, San Juan y Mendoza. “Estamos llamando a (el secretario de Educación, Carlos) Torrendell para que nos de una contestación porque ninguna de esas cosas fueron garantizadas”, le dijo a Página 12 Marcelo Creta, secretario de gremial de UTE-CTERA.
Desde la CONADU Histórica también celebraron el acatamiento. “Fue muy contundente la adhesión, pero además siguieron las actividades y tomas por parte de estudiantes”, confirmó la secretaria general del gremio, Francisca Staiti, a este diario. Además, valoró la unidad que mantienen con los otros dos sectores, rectorados y alumnos: “Se va construyendo, es activa y nos permite acercarnos en las coincidencias y respetarnos en las diferencias. El paro de hoy se potencia mucho cuando salen todos. Si no es en unidad es difícil salir de manera individual, el sector estudiantil está muy movilizado y nos ayuda bastante a sostener la visibilidad del conflicto”.
El próximo paro será de 48 horas el lunes y martes de la semana próxima. Desde la Federación Argentina del Trabajador de Universidades Nacionales (FATUN), que nuclea a lo no docentes, denunciaron que varios de sus afiliados cobran salarios de pobreza. “No dejamos de insistir en que nos reciban en otra reunión paritaria para solucionar, aunque sea, parte de los gravísimos problemas que tenemos”, explicó el titular del sindicato, Walter Merkis, a Página 12. Y agregó: “Tenemos nuestras dos últimas categorías por debajo de la línea de la pobreza, buscamos una mejora que les permita vivir con cierta dignidad. El monto promedio en categoría 7 es de 590.000 pesos. Si pudiéramos agregar 180.000 pesos mejoraríamos su situación”.
Más allá del paro, en varias provincias siguieron las actividades. En Tucumán hicieron una gran movilización desde el rectorado de la UNT hasta Plaza Independencia por el reclamo universitario, pero también para denunciar el accionar violento de la policía de la provincia que el miércoles desalojó una clase pública de la Facultad de Filosofía y Letras. “Jaldo, cagón, ni olvido ni perdón”, le cantaron al mandatario provincial, que ayer respaldó a los efectivos. “La Policía no actúa por voluntad propia, actúa por decisión del gobernador, que hará respetar el derecho de todos los tucumanos”, afirmó Jaldo.
Además, el gobernador peronista intentó deslegitimar la convocatoria estudiantil. “Lo chicos de las universidades tienen todo el derecho a protestar; soy uno de los que quiere más presupuesto para las universidades, pero para que le aumenten los sueldos a los profesores, para que mejoren las cuestiones edilicias; no quiero más presupuesto para que se pierda en el camino y luego lleguen a ser juzgados en la Justicia Federal”, agregó.
También hubo medidas en Mendoza, donde la comunidad educativa de la Universidad de Cuyo marchó desde el campus universitario hasta la Legislatura. En otras casas de estudios se hicieron permanencias o clases públicas o se mantuvieron las tomas, como en San Luis y La Pampa. Algunas hicieron asambleas interclaustros como en la Universidad del Nordeste, que abarca Corrientes y Chaco. En la Universidad del Comahue están organizando una gran movilización para el próximo miércoles.
En cambio, en la mayoría de las facultades de la Universidad de Buenos Aires se pospusieron las medidas por el paro y se retoman hoy. En varias, habrá asambleas para definir cómo sigue el plan de lucha. Hoy en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA se retoman las clases públicas en la puerta del predio para sacar el reclamo a la calle. “En lo que va del año, renunciaron entre 40 y 50 docentes, es un número muy importante para la planta total. La mayoría alegó algún problema salarial, tenemos sueldos que están muy por debajo de lo que se cobra en la actividad privada y muy por debajo de lo que se estipula por hora”, le contó a Página 12 Soledad Lorenzo, doctora en Veterinaria y profesora. El Consejo Profesional de Médicos Veterinarios de CABA establece un arancel de 10.900 pesos por hora trabajada, mientras que ella gana alrededor de 6000. Es jefa de trabajos prácticos (con docentes y estudiantes a cargo), trabaja 10 horas semanales, tiene más 15 años de antigüedad, un plus por título de Doctora y cobra menos de 250.000 pesos mensuales.
Otro de las medidas que se evalúan es la instalación de una Carpa Blanca en Plaza Houssay, frente a las facultades de Medicina y Económicas de la UBA. “Queremos defender la universidad con las cosas funcionando. Vamos a evocar aquel símbolo de lucha y hacer actividades extracurriculares, cursos y espacios de debate como para visibilizar a la sociedad y al barrio”, le contó a este diario Axel Santos, presidente del Centro de Estudiantes de Medicina.
El próximo miércoles al mediodía, cuando la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados debata el Presupuesto 2025, se harán clases públicas en todas las casas de estudio del país para reclamar 2 billones de pesos más para el sector universitario.