Más del 80% de los títulos en pesos están indexados. El Ministerio de Economía consiguió despejar obligaciones financieras hasta fin de mes, pero deberá cubrir más de $850.000 millones en mayo con bonos CER y vinculados al dólar
La deuda atada a la inflación se encarece en un contexto de índices de precios mensuales más altos, lo que obligó al Gobierno en los últimos días a quitar del menú a los inversores locales bonos a corto plazo indexados. En ese contexto, el Ministerio de Economía afrontará en el próximo mes y medio cerca de 1,5 billones de pesos de vencimientos de deuda en pesos en el mercado local.
La dinámica del endeudamiento en pesos, que se sostiene en buena parte en las colocaciones de títulos atados a la evolución de los precios (índice CER), es un elemento de preocupación para el análisis de la deuda argentina que hizo el Fondo Monetario. El organismo, en el informe que publicó luego de aprobar oficialmente el nuevo programa con la Argentina, advirtió sobre el crecimiento en la relevancia de este tipo de instrumentos en el menú de financiamiento.
Con datos a febrero, la deuda atada a la inflación representaba nada menos que el 82% de los bonos en moneda local emitidos por la Secretaría de Finanzas. Esto es: 7 billones de los 8,5 billones colocados en el mercado local en moneda doméstica están indexados. Los restantes 1,5 billones son letras y bonos a tasa fija.
En ese contexto de mayor peso de ese tipo de endeudamiento -que se encarece por la aceleración de los precios- el Gobierno deberá afrontar en el próximo mes y medio, el vencimiento de poco más de 1,2 billones de pesos ante los inversores en el mercado local. Tras la última licitación de bonos y letras de la semana pasada, le restan a Finanzas cubrir unos $368.000 millones. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), para mayo el calendario completo de exigencias financieras asciende a más de $850.000 millones.